Prisoner on Bird-Horse
Painting: Gesso and Oil on Canvas.
Size: 130 H x 97 W x 3.5 cm
2002
"El pájaro-caballo se presentó en el momento perfecto. Y no se sabe si de tristeza o de rabia o de impotencia o rencor, pero cada segundo que el prisionero aceptaba hacer de prisionero un cachito de él se moría. Así perdió las manos y los pies. Necesitaba escapar. Porque con tan solo 5 años de edad, el prisionero fue definitivamente condenado por los crímenes de su padre. El proceso fue largo y doloroso. Empezó el día de su nacimiento y la primera prueba en su contra fue que tenía sus mismos ojos. Pronto la lista se amplió y cada uno de sus comportamientos y habilidades dejaron de ser suyos y pasaron a ser “iguales a los de su padre”. Sin defensor ni merced, el tribunal fue compuesto por un único integrante todopoderoso, infalible y desgraciado: su madre. Y la condena fue más dura que una tortura. Pues vivir toda la vida creyéndose culpable de una historia ajena, realmente enajena. Así que un día, sin preaviso ni señal, el prisionero reunió fuerzas para huir de su madre y el pájaro-caballo se presentó en el momento perfecto. Y no se sabe si de alegría o de esperanza o de alivio o libertad, el prisionero consiguió huir y aunque le costó, al final le crecieron de nuevo las manos y los pies."